¡Entérate! ¡Chile implementa tecnología blockchain en proyecto de su sector energético!
Chile se convierte en el primer país sudamericano en aplicar esta tecnología en uno de sus ministerios.
Desde este pasado 5 de abril, la Comisión Nacional de Energía de Chile ha venido aplicando la tecnología blockchain, específicamente la de contabilidad distribuida (DLT), en el Proyecto Energía Abierta, una iniciativa del sector energético público que tiene como finalidad mejorar el registro de datos en esta área.
Susana Jiménez, ministra de energía chilena, fue quien dio a conocer la información y describió lo que significa esta nueva tecnología en el sector energético del país sudamericano. Según la funcionaria, uno de los beneficios será el poder manejar datos para acceder a ellos fácilmente, lo cual se da gracias a la capacidad del blockchain de concentrar la información necesaria y hacerla más segura.
“Se incluyó información de la capacidad instalada eléctrica nacional, los precios medios de mercado, los costos marginales, los precios de hidrocarburos, el cumplimiento de la ley de ERNC, la generación eléctrica de sistemas medianos, los factores de emisión y las instalaciones de generación residencial, entre otras, con lo cual se logra resguardar que la información no será modificada, adulterada, eliminada o hackeada”, dijo al respecto Jiménez en nota de prensa.
La ministra también resaltó la importancia de incluir tecnologías como la blockchain en procesos relacionados a la administración pública: “La información pública es un insumo importante para la toma de decisiones de inversión, diseño de políticas públicas o creación de nuevas herramientas al servicio de la sociedad, por lo cual, muchos de nuestros usuarios utilizan esta información para decidir aspectos técnicos, económicos y laborales”, dijo, añadiendo además: “Elevaremos los niveles de confianza de nuestros stakeholders, inversionistas y ciudadanía en general que utilizan los datos entregados”.
El Proyecto Energía Abierta cumplirá una etapa de monitoreo en el que se informará sobre los resultados obtenidos, las posibles fallas en la implementación, así como cualquier novedad que pueda servir para reforzarlo en el futuro y, así, poder aplicarlo en otros ministerios o entidades gubernamentales.
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