
Stephen Fry, el clásico narrador de la saga de libros de «Harry Potter»,
asegura que una IA ha utilizado su participación en la saga para robar su voz.
Los pequeños artistas no son los únicos que se han visto afectados por la IA.
Las malas prácticas de las compañías han llegado también hasta los grandes de
la industria. Este es el caso de
Stephen Fry, una de las voces británicas más reconocibles, y que además ha sido víctima
de robo por parte de la inteligencia artificial.
Stephen Fry reveló al mundo este hecho durante el festival CogX, llevado a
cabo en Londres, Inglaterra. Desde aquí, el actor reproducía ante sus
seguidores un trozo de documental, narrado con su voz. Sin embargo, tras
terminar, Fry se levantó y aseguró que ninguna de esas palabras había salido
de su boca, y tampoco había dado su permiso para que alguien la usara. Tanto
el actor como los asistentes del evento estaban igual de sorprendidos. Era
culpa de la IA.
Según comenta Stephen Fry, los creadores de dicha inteligencia artificial
habrían empleado su lectura de los siete libros de la saga Harry Potter para
alimentarla y entrenarla. Después de eso, la ofrecieron al mercado para quien
desease utilizarla en sus creaciones.
Recordemos que uno de los trabajos más ilustres de Stephen Fry en su larga
trayectoria ha sido narrar los libros de Harry Potter en Reino Unido, pero él
no ha dado permiso a nadie para utilizarla.
La situación asustó a Stephen Fry. Después de todo, y en sus propias palabras,
«podrían hacerme leer cualquier cosa, desde una llamada a asaltar al
parlamento hasta porno duro, todo ello sin mi consentimiento. Esto es solo
audio», aseguró Fry tras llamar a sus agentes, quienes estaban igual de
sorprendidos por la situación.
«Lo que se escuchó no fue el resultado de una compilación, sino que
proviene de una voz artificial flexible en la que las palabras se modulan de
tal manera que corresponden al significado de cada oración. No tardará
demasiado hasta que los vídeos deepfake sean igual de convincentes».
Esta situación vivida por Stephen Fry ha sucedido justamente cuando la
industria de Hollywood está viviendo su mayor huelga en los últimos 60 años.
Actores, guionistas, y muchos otros puestos de la industria cinematográfica
han unido en la protesta por los bajos salarios, las condiciones actuales de
trabajo y
la utilización de la inteligencia artificial para abaratar costes
de formas poco éticas.
Por su parte, el sindicato de actores SAG-AFTRA, del que Fry forma parte,
asegura que algunos estudios han negociado crear copias digitales de actores
de fondo. De esta forma, se pueden reutilizar en otras producciones sin
ninguna compensación o consentimiento. Esto, por supuesto, no ha gustado a
nadie.
Stephen Fry no es el primer actor de voz en sufrir los efectos de la IA. A
mediados de 2022, un grupo de actores para comerciales confirmaron que
una empresa había robado sus voces
para utilizarlas en anuncios. Todo esto, por supuesto, sin consentimiento o
retribución de ningún tipo. Una escena distópica donde las haya.
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